LAS PERVERSIONES SEXUALES
Cuando Freud descubrió la sexualidad infantil, el misterio de las perversiones sexuales, quedó desvelado. Los fines sexuales del perverso son los mismos que los del niño. Estamos por tanto en el terreno de la sexualidad pregenital, allí donde el Edipo no ejerce su carácter unificador. Freud añadió además que se dan actos, tendencias y fantasías perversas en la vida de todas las personas. Ahora bien, mientras el neurótico pone una barrera, una barrera que origina que las fantasías no se lleven a la realidad o sólo se lleven en forma de síntomas. La diferencia con la perversión es que en ésta, la persona lleva la fantasía al acto.